El pasado 4 de Enero nos reunimos unos cuantos de los tantos
que fuimos (contamos unos 25 a 30) integrantes de la emisora local Radio
Condado. Los que veis en la foto no son todos los que fuimos, pero sí los que
en ese momento estuvimos. Para mí faltaron Miguel Ángel Salas, Lucía Toledo,
Merchi Mayo, David el Peluquero (es como yo le conozco), Ildefonso Pinto, Elena
Mairena, Isabel Flores (porque estuvo malita), Frasco, Santi de la Vega y (por
favor que no me lo lleven a mal y me perdonen) muchos otros de los que tal vez
no recuerdo su nombre pero sí la impronta que dejaron en una emisora que, hoy
por hoy, no existe.
Todos hicimos comentarios acerca de nuestra experiencia en
la emisora y propusimos hacer un debate televisado para revelar las verdades
ocultas de una emisora que hizo historia con su larga y fructífera trayectoria
y que sufrió lo que todos los presentes acordamos en llamar una dura, lenta y
triste agonía política hasta su extinción.
Nada se sabe sobre su futuro pero sí de su pasado. Grandes han
sido todos los que han desfilado por los micrófonos o los controles técnicos de
una emisora que fue la envidia de toda la comarca onubense y de la que han
surgido personas y profesionales mucho más grandes si cabe de lo que ya de por
sí eran cuando entraron a formar parte de ella. Muchos continúan su labor
periodística en una u otra vertiente, otros han preferido otras como la
empresarial, la docente e incluso la sanitaria. Grandes fueron los programas
que se emitían porque contenían una ilusión y un acabado artesanal de los que
hoy, puedo asegurarles, nada queda. Era auténtica RADIO.
Personalmente puedo decirles que crecí en ella. Tanto que
llegó a quedarse pequeña no sólo por mis ansias de saber y hacer más sino
porque le acotaron los espacios, la libertad y sobre todo el presupuesto. Dice
el refrán popular que “no hay peor ciego que el que no quiere ver” yo añadiría
que además fueron necios pues el poder de los medios de comunicación
actualmente es indudable. Habrá quien diga eso de “muerto el perro se acabó la
rabia” pero este es mi blog, mi opinión y esta una de mis “verdades ocultas”. Ni
que decir tiene que todo aquel que lo visita sabe que está invitado a dejar la
suya. ¡Ah y sin censura!
A pesar de todo, lo mejor de nuestro encuentro fue las risas
que nos echamos a costa de la estrella más rutilante de los medios locales (por
supuesto presente, que no hay nada mejor que reírse hasta de uno mismo) y que,
aunque fuésemos una mínima representación de los que en su día fueron, la Radio,
nuestra Radio, Radio Condado, estuvo allí.
Las cosas bien hechas y que funcionan no deberían agonizar hasta desaparecer. No pude escuchar esta emisora en su momento, miles de kms nos separaban, pero conozco algo de la historia, mucho de un estupendo profesional y algunos tramos grabados... y si hoy en dia falta el cariño y la dedicación que se ve en los ojos de quien me habla de Radio Condado.
ResponderEliminarFirma: M.G.L
Hola... Pues sí GRAN RATO JUNTOS y algunas ausencias justificadas y otras que no lo estuvieron tanto. El año que viene intentaremos mejor cuadrar las agengas de todos. Lo importante, más que el menú o el restaurante, tener ganas de recordar aquellos años en la ilusión y las ganas de trabajar nada tenían que ver con la palabra nómina. Eramos felices sin mirar la cuenta corriente a fin de mes.. Eso también ha cambiado, como los años, como el aspecto, como tantas y tantas cosas... Cada uno tiene su trabajo, su destino, su vida... pero tener ganas de volver a ver a alguien no tiene precio. Y , la mayoría, seguimos con ganas de ver a los demás. La emisora murió por culpa de todos y culpa de nadie... pero una bonita amistad, cuando uno no quiere, nunca muere.
ResponderEliminarAH! Y GRACIAS A LOS QUE HICIERON POSIBLE QUE LA AMISTAD NACIERA DELANTE Y DETRÁS DE LOS MICROFONOS.