Los 3 estandartes que sustentan mi estancia en esta ciudad son: Marcel, Raxel y Ketty. Con ellos y para ellos este comentario puesto que es con ellos con quienes comparto la mayoría de eventos culturales, culinarios, conversacionales y emocionales de mis últimos 2 años... ¡Y ME ENCANTA!
En primer lugar, debo dar las gracias a Dani Martín, ex-cantante de El canto del loco por haberme hecho pasar por uno de los conciertos más anecdóticos de mi vida (y eso que han sido muchos eh). Ay, Ketty la que nos cayó en ese concierto... chorreando de lluvia que pasamos todo el concierto, cantante incluido pero Marcel y yo contentos de ver tu felicidad.
Raxel, fueron bonitas las coreografias y la música de determinadas piezas de la Compañía Nacional de Danza, ¿verdad? y las canciones de Bandas Sonoras de películas del pasado fin de semana también a pesar de los innumerables y contínuos fallos del técnico de imagen, iluminación y sonido que el teatro Kursaal comete, ¿eh?
A Marcel ya le he contagiado del efecto "Acusados" je je je! Sólo ha visto un par de capítulos de la 2ª temporada y última (sigh!) pero ha sido suficiente para que quiera ver la 1ª. Te lo advertí, me parece una de las buenas series de factura española de intriga que se han hecho en los últimos tiempos, no exenta de crítica y vapuleos varios en la parrilla de programación pero, sinceramente, esa Jueza Ballester y sus acólitos son mucho pan para mojar eh! Ojalá el público no pasase de series como esta y si lo hiciera de bodrios infumables como Gran Hermano elevado al infinito o Sálvame... elevado al infinito también. Para mí, lo que sin duda lo que eleva al infinito a éstos últimos es su mal gusto.
Otro tema es la película "Amor y otras drogas" de la que ya hablé anteriormente en este mismo blog. Los 4 vimos el film y coincidimos en el magnetismo de ambos actores y en que es una tragicomedia poco usual aunque ahora que lo pienso ¿no os recuerda a aquella historia que hicieron Keanu Reeves y Charlize Theron y a tantas otras en las que uno de los protagonistas pasa por una calamitosa enfermedad con distintos finales? ¿podemos decir que estamos ante el mismo perro pero con distinto collar? Puede ser.
Y para terminar, Ketty, ¡qué bien lo pasamos ayer viendo Kung Fu Panda 2! ¡Qué belleza de imágenes amplificadas por el 3D! ¡Qué divertidos los personajes y qué bien construidos! Otra segunda parte que en nada desmerece a la primera. ¿Estamos ante el fin de la certeza del dicho popular: segundas partes núnca fueron buenas? Puede ser. Lo que verdaderamente importa es que lo pasamos como auténticos enanos comiendo chuches, ¿o no?
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